La organización de Patagonian Expedition Race se está trazando varios objetivos
distintos a los estrictamente deportivos que implica esta carrera extrema.
La idea es aprovechar el contacto privilegiado que ofrece esta competencia con
la flora y fauna en los parajes de la Patagonia para impulsar la conservación de
especies endémicas en peligro de extinción. Una de estas iniciativas impulsada
por los organizadores, consiste es el catastro de huemules, una tarea que será
llevada a cabo en la región de Magallanes en una alianza con la Universidad
Austral de Chile. En este artículo Claudia Urquieta profundiza en los
detalles de esta iniciativa de conservación.
El contrate a este proyecto de conservación se genera en la región de Aysén,
donde el Comité Nacional Pro Defensa de la Fauna y Flora (Codeff) aseguró que el
proyecto energético HidroAysén pone en riesgo el hábitat de los huemules de la
zona. Estas son las dos caras de la moneda para proteger a este ciervo de
la patagonia.
Patagonian Expedition Race impulsa catastro de huemules
La
primera expedición del "Proyecto de Conservación del Huemul", impulsada por una
alianza entre Patagonian Expedition Race y la Universidad Austral, vuelve a Punta Arenas, luego de recorrer durante 10 días los sitios donde los
huemules se movilizan de manera constante en esa región.
El equipo,
compuesto por seis personas, entre biólogos guías y periodistas, se movilizó en
el Monte Tarn, el río Santa María, río Yumbel, río San Nicolás, en la Península
de Brunswick, con el fin de reconocer los sitios de hábitat natural de esta
especie de cérvido.
El proyecto,
que no tiene fines de lucro, pretende catastrar los ejemplares que se encuentran
en las penínsulas de Brunswick y Muñoz-Gamero, para así cuantificar las colonias
de la región y poder identificar las políticas públicas y las prácticas más
idóneas para asegurar su supervivencia. Ello, pues se trata de una especie en
peligro de extinción.
Según
especialistas, dos tercios de la población de huemules se encuentra en
Magallanes. Pese a ello, existen muy pocos estudios en terreno sobre la
distribución y el estado actual de estas poblaciones, principalmente por el
aislamiento y la lejanía de la zona. Por ello, el
Patagonian Expedition Race, que ya tiene ocho ediciones realizadas en la
Patagonia chilena, se alió con la Universidad Austral para unir destrezas y
reunir información sobre esta especie.
Anthoni Muñoz,
líder de la expedición, explica que "son animales indefensos, que se resguardan
mucho de sus depredadores y muy recelosos de la presencia humana, huidizos y
difícil de encontrar a simple vista". Y agrega que
"hemos seguido sus rastros para determinar la zona en que estas familias se
movilizan". Muñoz detalla
que tuvieron sólo un breve avistamiento durante la expedición, "pese a que
abundan huellas y señales de su paso, dando cuenta de una relativa abundancia de
animales".
El rol de los
deportistas
El inicio de
las observaciones empezó durante la versión de este año de la carrera extrema,
entre el 8 y el 18 de febrero. Al comienzo de
la carrera, cada equipo recibió un set de tubos de vidrio donde depositó restos
de fecas, pelajes o huesos de huemules que encontraban durante sus rutas, ya que
a través de estos métodos indirectos es posible obtener datos confiables para
cuantificar su población. Este era un requisito fundamental para terminar con
éxito la carrera y se realiza porque los competidores recorren zonas de muy
difícil acceso, donde estarán muy cerca de los lugares donde habitan huemules.
Según explica
Muñoz, en agosto se iniciará la segunda expedición, cuyo objetivo es llegar a
Isla Riesco, "que alberga una importante población de huemules en Magallanes". A
través de las redes sociales se está desarrollando una campaña internacional
para conseguir donaciones y cubrir la primera etapa del proyecto.
Símbolo patrio desde 1929
El huemul es
una especie de ciervo endémico que habita en el sur de Chile y Argentina. Fue
declarado en peligro de extinción en 2003, entre otras razones, por la acción
del hombre, incendios forestales, enfermedades de animales domésticos,
alteración en la relación con sus depredadores naturales, la caza furtiva y el
desarrollo del turismo.
Mientras en la región de
Magallanes se impulsa la protección de Huemul, en Aysén corre un peligro
inminente.
Codeff aseguró que la inundación producida por Hidroaysén afectará a los huemules
El
Comité Nacional Pro Defensa de la Fauna y Flora (Codeff) rechazó la aprobación
del proyecto energético HidroAysén, alertando que las eventuales inundaciones
que se producirán por la construcción de represas en los dos ríos, Baker y
Pascua, afectarán al huemul.
A
través de un comunicado, Codeff dijo que quienes apoyan el proyecto sostienen
que HidroAysén "apenas inundará un 0,05% de la región de Aysén, pero nada
mencionan sobre las 24.000 hectáreas adicionales que serán impactadas por los
2.200 kilómetros, de tendido eléctrico asociado al proyecto, que cruzarán siete
regiones del país".
"La
inundación del terreno acorrala aún más al huemul, especie emblema de nuestro
país de la cual quedan menos de 2.500 individuos. Como medida de mitigación, el
proyecto sólo contempla mejoras en el hábitat adyacente, ignorando conceptos
ecológicos tan básicos como la capacidad de carga del hábitat", expresó la
entidad.
La
entidad de defensa de la fauna y flora instó a las autoridades a que "no
dediquen más tiempo a legitimar este negocio privado, sino que se aboquen a
fomentar la incorporación masiva de energías renovables no convencionales a la
matriz energética de Chile, las cuales tienen el potencial de generar varias
veces los kilowatts que generaría Hidroaysén".