Se estima que en Estados Unidos y Canadá existen aproximadamente 11 millones de pescadores de mosca, por lo que no es raro que éstos se multiplican y distribuyan a lo largo y ancho de toda la parte norte del continente Americano. El Estado de Utah no es la excepción, y pese a su condición de territorio de montañas, en sus 219.997 Km2 se desarrolla una de las pescas deportivas con moscas más interesantes del Centro-Este de USA.

      La pesca con mosca de Utah se define por esencia como una experiencia en aguas que fluyen por las montañas rocosas, una pesca de excelencia muy técnica y con interesantes desafíos. En esta nota rescatamos la experiencia de Gustavo Arenas por estas aguas, un experimentado en la pesca de las aguas de la Patagonia y que ahora nos comparte sus impresiones de pescar en el Estado del gran río Colorado, el río Green y el río Provo, entre muchas otras cuencas llenas de mitos e historias.

 

Los "fishing holes" de Utah.

      A principios de agosto del 2013, viaje a Salt Lake City en Utah y decidí ir a conocer las bondades de la pesca que aquí se ofrece. Tras consultar entre mis amigos, me contacté con un amigo de un amigo, quien también es un pescador con mosca, el cual luego de conversar sobre el tema y las posibilidades, gentilmente se ofreció para acompañarme y mostrarme la zona , y sus "fishing holes".

      Salimos con dirección al Strawberry River, cerca de Duchesne. La zona es parecida a la Patagonia norte de Argentina. Un poco árido, con ríos que se desplazan tranquilamente serpenteando por la estepa.

      Las marrones que pescamos tenían un color amarillo fuerte, y yo pesque mi trofeo de 48 centímetros con una ninfa amarrada a un streamer.  

      Al día siguiente fuimos al Green River, cerca de Flaming Gorge National Recreation Area.  Este es uno de los ríos importantes del Oeste de Estados Unidos, el cual pasa dentro de un cañón profundo, similar al del río Colorado.  

      El río tenía muchísimas truchas, y al estar el nivel del agua bastante bajo, era como estar observando dentro de un acuario. Los peces no son tan fáciles de engañar. Las truchas eran muy selectivas, ya que en nuestros días de pesca éstas sólo estaban comiendo pequeñas ninfas que sólo podían ser igualadas con moscas del número 20 al 24, por lo que la pesca fue mucho más restringida, exigiendo necesariamente el usa de indicadores de pique.

      Una gran experiencia para repetir y recomendar.

 

Revisa un video con la pesca en los "fishing holes" de Utah.

 

Agradecimiento para la tienda Patagonia de la ciudad de Puerto Varas.