“Sentir” palabra de peso pero que hoy en día se toma a la ligera. En el mundo del fly fishing no es la excepción veo a diario a pescadores llegar a las tiendas y consultar que hay de novedad, cada vez que oigo eso me pregunto será tan malo el equipo que posee que necesita algo nuevo para sentir y sentirse mejor pescador? O no saben valorar 100% lo que tienen en la mano? Hace algunos fines de semana atrás Salí de pesca con uno de mis viejos amigos en esto de las moscas y fuimos tras los esquivos pejerreyes chilenos, fabuloso día el tema de conversación de ese día fue la sensación de pescar, tratar de definir esa palabra en pesca con mosca, lo menciono en esta nota porque a la semana siguiente de salir con mi amigo fui de viaje a Coyhaique y recordé la conversación y se las mencione a mis amigos de ese viaje, escribí en mi pequeña libreta que me acompaña y en la cual escribo lo referente al día de pesca vivido, es algo que adopte hace años.

      En este nuevo viaje mis amigos tuvieron la oportunidad de conocer a Edgar guía de Patagonia Fly Waters , operación fundada por el mismo hace ya varios años.

      Una vez con los pies en Balmaceda nos trasladamos a Coyhaique para ubicarnos en nuestro centro de operaciones (cabaña) y reunirnos con Edgar para afinar detalles de este nuevo viaje de pesca, cabe mencionar que este grupo no está interesado en la cantidad si no en la calidad de pesca que ofrece esta privilegiada zona de chile.

      El clima nos favoreció en todas las jornadas, mientras nos dirigíamos a calibrar un poco la mano en lo que quedaba de tarde en un afluente del Simpson, algunas truchas de buen tamaño sobrepasaban el kilogramo se encontraban tomando algunas efímeras rápidamente la caja de secas en la mano buscando la indicada estiramos un poco el líder su respectivo nudo bien confeccionado presentación respectiva y al cabo de una corta deriva, “bingo” trucha que arranca aguas arriba luego de algunos saltos y una segunda carrera, llega a mis manos para ser liberada, dejo pasar algunos minutos mientras reviso mi nudo a la mosca y escucho a mi amigo decir yessss!!! Tenía una linda arcoíris que doblaba bastante su caña y sacaba sonido de su clásico carrete con freno click, “en gustos no hay nada escrito” y es durante el acto de liberación que escuchamos a mi tercer acompañante de este viaje exclamando “santa pararachute, nuuunnca fallas” tenia una fario de similar tamaño algo mayor a un kilo y medio unas desenfrenadas carreras con intentos de acercarse a unas ramas de un árbol sumergido tuvieron la incertidumbre de nuestras miradas pero la experticia de los años hacen al maestro y logro hacer su devolución como dios manda con su respectiva foto, estas capturas se prolongaron por alrededor de una hora y luego todos ya teníamos charla para la cena, sin duda estas arcoíris y farios nos bajaron las revoluciones de captura, jajaja. .!

      Nuestro segundo día una laguna en la cual por las condiciones favorables del nivel de agua pudimos realizar un interesante vadeo organizado por nuestro guía Edgar, como ya había visto nuestra forma de castear en la tarde de ayer, nos posiciono en lugares donde nuestra individualizada forma de castear no nos ocasionaría problema alguno, adopte la última sección después de mis amigos y en corto plazo de tiempo comenzaron las tomadas de nuestras moscas en lo personal me quedo con mi primer pique muy definido y violento, lo acompañe de una sutil clavada para desatar un loca carrera de mi truchoncito que no se dejaba conocer y que solo dejaba avistar con un resplandor a unos cuantos metros del veril que se forma en esta laguna, luego de liberar mi truchoncito cercano a los dos kilos y algo mas , mi buen guía es requerido por mi otro partner para que lo asista con su captura y su fotito con variados piques de truchas marrones, que de costumbre se diferencian por sus enérgicas tomadas de streamers, luego mis amigos avanzaron adelantándome y me fui quedando algo rezagado para detenerme y observar tranquilamente mi alrededor y encontrar esa tranquilidad solitaria que a veces es tan necesaria, luego de empaparme de esa sensación y tratar de retratar en algunas fotos retorne a los lanzamientos y me sume al grupo, cuando la actividad disminuyo, Edgar nuestro guía nos traslado unos cuantos kilómetros en camioneta para pescar un hermoso spring creek del cual debo decir que me considero todo un fans y este el cual no conocía no fue la excepción castear sigilosos a un par de metros de la rivera de estos pequeños cursos de agua hace estar más alerta que en un rio, nunca se sabe si será la picada de un truchón o una trucha de tamaño normal, mis amigos con sus caras llenas de risa por capturas conseguidas y en la cual debo mencionar una de estas capturas ya que fue muy interesante y de la cual hay testimonio grafico, la mayoría de los que pescamos en spring creeks sabemos que las moscas más productivas son atractoras y la reina es la fat Albert, pero la película se la robo una marrón muy adulta y bastante descolorida en sus manchas laterales características que no quiso subir por la atractora si no que se fue a toda velocidad a una pequeña ninfa con patas que estaba atada en tándem a esta atractora y ver su bocota abierta para tragar tan pequeña ninfa y obviamente su respectiva fotos para que no quede duda, jajaja, al comenzar a desvanecer la claridad que nos quedaba nos dirigimos a la camioneta y retorno a la cabaña para su respectiva sesión de bla bla sumado a una buena cena reponedora.

      Tercer dia la zona a enfrentar seria las cercanías de cerro castillo mítica entre los pescadores que cada año regresan a coyahique, corresponde rio pero una vez estando a la vista cambiamos de parecer debido a la cantidad de sedimento que este traía en su caudal, “será la próxima” nuestro guía ya contaba con un plan “B” para la ocasión y nos sorprende con un tributario nada de despreciable en tamaño serian entre un kilo y kilo y medio todas marrones muy generosas, afloro la especialidad de la casa “ninfas con indicador de pique” algo muy utilizado en la zona central con las selectivas truchas que lo habitan.

      Comer sentado en un viejo árbol quemado por el gran incendio que realizaron los colonos patagones para establecerse en la región es algo que le suma valor agregado y al viaje de las sensaciones del cual ya estaba adoptando el nombre, la sesión de fotos de hoy fue en su mayoría para un águila posada serenamente en un árbol a orillas del camino, al ver sus garras me apiade de las libres que habitan la región y no importa que esté lleno de ellas.

      Retornando a la cabaña estábamos como niños pequeños de paseo quien avistaba más libres por el camino.

      Cuarto día la esperada flotada del río paloma uno de los imperdibles por mí, durante el trayecto Edgar mencionada las condiciones en la cual se encontraba el río y lo más conveniente para adoptar a la estrategia era pescar con línea flotante y atractoras muy visibles para así obtener buenas capturas, no demore en revisar y ordenar mi caja de moscas para no perder tiempo valioso sobre el cataraf, cuando uno tiene la oportunidad de flotar todo pasa una sola vez y si no estás listo perdiste como en la china a menos que este en algún sector de playa, una vez en la rivera del paloma mis amigos se equiparon yo ayude a las labores de posicionar el cata y revisar que cada strap este firme a la sujeción del frame, ya todo listo comenzamos todo a bordo equipos comida bebestibles y ganas de sobra, una vez más el rio paloma había sido generoso con nosotros truchas muy saludable y de buen tamaño en promedio los dos kilitos.

      Recuerdo que la corriente en un tramo es relativamente moderada y observe un gran troco sumergido, saco un par de metros de línea de mi carrete lanzo y al acelerar el drag de la mosca veo esa sombra oscura que succiona mi Fat Albert de la superficie, la clavada fue enérgica para que esta arrancara con dirección a la correntada y no buscara refugio en el tronco sumergido , tal cual lo pensé hizo todo lo contrario, me dejo en un par de segundos en aprietos y después emprendió carrera corriente arriba en un lugar despejado, cabeceos y carrera muy fuertes para mi líder de tres x puesto a considerable prueba, pero al final gano la experiencia nuevamente, a mi partner en el cataraf se le presento algo similar pero termino en un corte de mosca a la mitad de la pelea, luego paramos en una playa para reponer energías y la sesión de fotos guateo por falta de carga de baterías “pajaron el dueño de la cámara ó sea el que escribe, jajaja”.!

      Escuchar chucaos mientras lanzaba un streamer a algún lugar prometedor era parte de la armonía que imagine antes de realizar este viaje que hasta el momento era muy memorable, estamos próximos a terminar la flotada sus piques de última hora y todos felices y contentos, cata sobre el carro y retorno a la cabaña para finalizar con una noche de casino y vituperios propios de la actividad.- Quinto dia y segunda flotada esta vez lago, pero había un detalle ya no estábamos con mi partner al 100% la pasada por el casino dejo secuelas en el cuerpo, y una fotosencibilidad que se las encargo.

      Basto que mi partner tuviera el primer pique y las baterías se recargaron de la nada, una hermosa marrón de alrededor de dos kilos y medio bastante robusta buscaba refugio a toda carrera entre juncos, el partner ya sabía que hacer levantar rápidamente su caña lo mas que pudiera para hacer el menor enredo posible y comenzar a forzar la salida de los juncos a los minutos después de esta acción una linda foto y una hermosa trucha se tomaba su tiempo para recuperarse de su obstinada lucha.

      Una seguidilla de capturas marcaron la mañana y con el correr de la tarde se hacía presente ese murmullo en la cabeza cámbiate a seca pone fatalbert , hice caso al murmullo y nada insistí y nada regrese a los streamer y “bingooo” marrón sea en la mano era la última jornada y había que aprovecharla al máximo.

      Resumiendo un poco para no entrar en detalles técnicos de pesca lo cual no es el fundamento de la nota sino mas bien la camaradería existente entre amigos y guía, además lo bueno del servicio ofrecido por Edgar y su operación  Patagonia Fly Waters , nos dejó en lo personal muy satisfechos.  La pesca es uno de los pretextos para salir a buscar recuerdos y anécdotas memorables en un viaje, no sólo son las capturas y los tamaños de las truchas.

 

Otras fotos de este viaje: