Moscas: Artículos y Notas técnicas de moscas y montajes

  La Vaguada - Flyfishing, Outdoors & Outfitters

   
 

 

 
     Escrito por:  Pablo Rodrigo Pérez 
     Sitio Web: www.mendozaflyshop.com
     Imágenes y contactos:  pablo@mendozaflyshop.com
 

    Esta vez, mi destino de pesca fue Osorno, en la décima región chilena, estuve invitado por Javier Roses y su familia, el lugar prometía muy buena pesca y realmente así fue, más allá de lo salvaje de las truchas y su buen porte, el paisaje constante de cada lugar que visitamos fue siempre maravilloso, grandes bosques y montañas tapizadas de verde intenso me decían que estaba pescando en Chile.  En varias ocasiones deseaba que el pique fuera más distanciado para poder disfrutar del majestuoso azul y verde que tenía frente a mis ojos, un lugar para soñar.

 

    En tan sólo tres días, por falta de tiempo personal, recorreríamos un puñadito de los lugares más importantes de la zona, sabemos que para descubrir cada rincón necesitamos una temporada entera, pero nos dispusimos a buscar pesca y diversión en un nuevas aguas, al menos para mi, digo esto por que Javier Roses, quien me invito, es un conocedor de esta zona y excelente pescador.  Hablando con muchos pescadores chilenos y argentinos, muy pocos han pescado estos lugares, y creo es por que otros ambientes tomaron mas fama y se ubicaron en los destinos de los pescadores nacionales y mundiales.  Osorno esta ubica a 913 Km. de Santiago, la capital de Chile, a sus alrededores se encuentra en zona de influencia al sur el Lago Rupanco y al norte el Lago Ranco, hacia el Este está el pueblo de Villa la Angostura (Argentina) y al Oeste la misma ciudad de Osorno, esta cuenta con 128.000 habitantes y es una linda y pintoresca ciudad.

 

 

 

    Nuestra pesca comenzó el primer día en una lagunita del parque nacional Puyehue, a la que se accede en Float Tube o botes para poder pescarla, de lo contrario no seria posible ya que tiene en todo su contorno infinidades de juncales que la encierran y rodean dejándola así virgen para quien intente pescar de orilla. Esta lagunita junto a dos más conforman un circuito de tres ambientes más que selectos para divertirse a lo grande, cada una tiene algo de especial y podríamos decir que uno puede usar variadas técnicas de pesca, como también posee diversidad en cuanto a especies de truchas.

    La primera laguna sólo posee truchas arcoiris en cantidad y calidad, es muy generosa y con moscas del tipo de las ninfas, en este caso usamos una hare´s ear beige que brindó más que éxitos, también funcionaron todos los modelos que imitan ninfas de Dragon y Damsel, digamos que uno podría sacar más de 30 truchas en una tarde.   Las técnicas de pesca fueron con línea de hundimiento y casteando desde el bote a remos deslizándonos suavemente nos aproximábamos a troncos caídos, hileras de juncos e infinidad de lugares donde al acercarnos palpitaba el corazón sabiendo que ahí estaba una arcoiris lista para atrapar mi mosca,  todo esto embellecido por el constante sonido del “chucao” (pajarito chileno).

 

 

    Sobre el extremo Este, le ingresa un profundo Spring Creek, que entre meandros y pastos largos va dejando una figura circundante hasta que vierte sus aguas heladas en la lagunita, mirando hacia arriba se puede observar que viene de muy arriba bajo la sombra del tupido bosque.  En esta boquita pescamos un cardumen de arcoiris que se dedicaban a tomar pequeñas ninfas que venían por el agua, se encontraban formando una especie de punta de flecha corriente arriba, la más grande tenia la delantera y hacia atrás caía el tamaño de las demás, con finos lances y leaders muy largos de entre 10 y 12 pies con un terminal 5X podíamos engañarlas sin que sospecharan en lo más mínimo.

    Continuamos remando y buscando rincones mientras lanzábamos, en ocasiones se veía el fondo como si fuera una pecera, algas, helechos, troncos, y truchas nadando en busca de comida,  sólo había que tener paciencia y dejar caer prolijamente la mosca a unos 2 metros por delante de la trucha y de inmediato se veía como ondulaba su cuerpo tomando velocidad y atacaba, la pelea siempre fuerte y de grandes saltos, todo un placer para quien practica pesca fina a trucha vista.

    El clima fue muy agradable, muy nublado sin viento y de a ratitos se hacia presente una fina llovizna que no deja que los helechos y bosques se secaran.  Una reconfortable cena hecha por Nano, nos esperaba en la casa de Javier, nuestra vista fue el apacible lago Puyehue.

 

 

    En el segundo día nos esperaba la pesca de la segunda lagunita, esta es más grande a mi parecer y se encuentra en un bajo, rodeada por montañas al igual que la primera, sólo se puede pescar embarcado.  La diferencia es que acá tenemos truchas marrones y arcoiris, las marrones son de mayor tamaño y se encuentra sobre el sector de juncos más profundos que posee esta laguna, las arcoiris están en zonas más bajas y a la salida del río que la desagua

    Este día fue todo un festín de moscas secas.  Comenzamos pescando como en la otra laguna, con ninfas y vi que se acercaban pero no la tomaban, mientras Javier remaba el bote acomodándolo en justa posición para que yo realizara los lances, al no encontrar pique me dedique a observar detenidamente el comportamiento de los Damsel Fly o Libélulas volando sobre el agua, estos se asentaban de vez en cuando sobre los juncos o el agua, no era muy distinto a lo que pasaba en la otra laguna, pero algo me hacia pensar que teníamos diferencias marcadas, hasta que vi como una trucha salto más de 40 centímetros para alcanzar un Damsel que volaba sobre la superficie del agua.   Este grande pero frágil insecto se salvo por milagro y del susto se acento rápidamente en un junco como para analizar la situación, cuando sin darle tiempo salto otra trucha, esta vez una marrón, y lo despego del vegetal con su boca, cayo nuevamente dejándose hundir entre los helechos.

  

 

     Con Javier nos miramos y no podíamos creer como lo había cazado, evidentemente esta técnica de atraparlo en los juncos la tenia muy bien dominada, lo que nosotros no podíamos hacer era asentar moscas en los juncos pero si hacerla flotar muy cerca de donde comían los reales.   La decisión fue inmediata cambiar la línea de hundimiento y pasar a la de flote, alargar el leader y buscar una buena imitación de Damsel azul, para intentar copiar lo que habíamos visto.  En el primer lance que se ajusto entre los juncos, fue inmediato, ví como salía la trucha de abajo a gran velocidad y llevaba en su boca mi mosca, al caer se hundió y se enredo entre los canales de helechos, por lo que el corte fue inmediato.   Nos miramos con caras de gran asombro e interrogación, ya tenemos la mosca y técnica, sólo falta ahora hacer algo para la trucha no se enrede y corte.

    Finalmente, pensamos en engrosar el tippet, y no dio resultados, ya que notaban que la mosca no era natural en su caída y menos al estar posada, así es que regresamos al tippet 5X.   Entonces Javier pensó lo siguiente: apenas la trucha vuele en el aires con la mosca en la boca clavarla y presionarla así nosotros, de esta manera con la altura que vuela caerá de este lado del canal de helechos.  Sonaba interesante,  así que espere el segundo pique y me anime a darle más fuerza de lo normal y bien...!!!!!!!  voló, cayo del otro lado de los helechos.   Javier remo hacia adentro de la laguna para que yo la peleara en aguas más profundas y sin tantos obstáculos, de esta manera obtuvimos unas cuantas truchas, hasta que vimos un gran borbollón, este provenía de una trucha que comía en una lagunita formada tras los juncos, se ve que ahí estaba llenándose de Damsel que caían en su terreno, la tentación fue grande, pero sabíamos que perderíamos la trucha por no poder pelearla.  En este caso supuse que se metería entre los juncos con seguridad, de todos modos y por esas cosas que tenemos los pescadores de curios al igual que las truchas, le tire como para ver que pasaba y esta vez sin dejar que cayera al agua salió y tomo la mosca en el aire.  Nos asustamos y sin hablar vimos como los juncos se abrían y cerraban al pasar la trucha y  por su puesto que corto sin pedir permiso.  Esto no seria problema si no hubiésemos perdido la ultima mosca de Damsel de color azul que teníamos, así es que ahora a buscar moscas que fueren parecidas. 

    Si bien encontramos algunas imitaciones, nos quedó la duda de que si hubiésemos tenido el Damsel azul pescábamos más y más grandes.  Bueno, pero es un pensamiento de un pescador ....¡no!.

 

 

 

     Nuestro tercer día fue elegido el río Gol Gol, éste junto con el río Allipen ubicado más al norte, son dos de los ríos que me encantan, por su indiscutible belleza, conformación, estructura, tipo de aguas y paisaje circundante.

     Nuestra idea fue pescarlo flotando, así que elegimos el tramo desde la ruta internacional que une Entre lagos (Chile) con Villa la Angostura (Argentina).  Este sector deja abierta la posibilidad a navegarlo en un corto periodo de tiempo como fue el caso nuestro, entramos al río a las cuatro de la tarde y llegamos a su desembocadura en lago Puyehue aproximadamente a las nueve y media de la noche.  Javier remaba el bote y yo pescaba, en el primer pozón que nos detuvimos ya que las truchas se vieron muy activas y obtuve dos o tres arcoiris chicas.  Si bien mi esperanza era un salmón coho o una trucha marrón residente que alcanzan muy buenos portes, también disfruté de truchas cercanas al medio kilo y un poco más.  La pelea de estas truchas es muy fuerte y no se dejan dominar con facilidad.  Viendo que dio muy buen resultado decidí continuar con esta técnica, consistía en derivar pequeñas ninfas por las corrientes centrales siempre que pasara cerca de los viejos troncos que se encuentran caídos a orillas de este hermoso río.  Cada pozo nuevo, cada lugar donde Javier me indicaba con su dedo índice, cosa que hacia que se me disparara el corazón... tuvimos buenos piques o vimos truchas moverse.

 

 

     Aproximadamente poco antes de la mitad del recorrido le cae el río “Mocho”, un río tributario del Gol Gol.  En esta junta apareció el gran pique que uno siempre espera, fue una trucha marrón de lago de aproximadamente unos 3 kilos, muy gorda y de muy buena salud.  La pelea se extendió más de lo esperado y con todo gusto pudimos fotografiarla y devolverla al agua.  Pasada esta linda experiencia me dedique a pescar desde arriba del bote "ninfeando" las costas y disfrutando del paisaje.  No tuvimos pasusas en los piques, ya que se mantuvo constante,  como para no dejar que cayera la adrenalina al sentir vibrar la punta de la caña y menos al visualizar paisajes tan llenos de naturaleza, bosques cercanos, viejos árboles que tapizan el horizonte y cascadas que fluyen de lo alto de las paredes circundantes.

     Sobre el atardecer llegamos a la boca del lago Puyehue y con los últimos lances cayo la noche,  así que Nano y Javier remaron hasta la orilla donde se recuperaron los botes y con mucho para contar y disfrutar, cene junto a estos dos buenos amigos.  Contamos historias de pesca y planificamos un nuevo viaje a la zona de la décima región en la provincia de Osorno.

 

 

 

 

     - Quiero invitarlos a esta nueva ventura en Osorno, ¿Se anima a que pesquemos juntos estas lagunas y el río Gol Gol ?

    - Contácteme directamente al e-mail pablo@mendozaflyshop.com,  yo programaré todo el viaje.   Esta es una pesca fina y especial por lo que me gustaría que sólo seamos dos pescadores.

     Quiero agradecer especialmente a la Familia Roses por permitirme conocer este lugar encantador y brindarme todo su apoyo, como así también a Nano por su amistad y conocimiento de la zona.

 

 

 

 

 

 

 

 
 

Informaciones a   contacto@lavaguada.cl  -  Valdivia  - Chile