Pasaron
ocho o nueve meses desde nuestra primera visita en la
que fuimos a relevar la pesca, con éxito, de Tarariras
(ver nota
Tarariras, Otros Peces y Turismo en Ramallo). Le
Había llegado en esta oportunidad el turno al Dorado.
¿DORADOS EN INVIERNO? En la provincia de Buenos Aires, a
sólo 200 kilómetro, es bien posible en condiciones normales, es
decir, sin alteraciones violentas de clima como nos
sucedió el día de pesca. Pese a ello obtuvimos
resultados y si bien no conseguimos los grandes, se
hicieron presentes unos cuantos chicos y medianos.
El
aporte organizativo de Osvaldo Villareal, Director de
Turismo de Ramallo más la colaboración de integrantes de
la Cámara afín y prestadores de servicios fue de vital
importancia.
Llegamos un domingo, cercano a fines de
julio, tras un rápido viaje de menos de dos horas. Ese
día la temperatura alcanzó una infrecuente marca de 27.8
grados, por la noche llovió y el lunes amanecimos con
solo 6 grados, nublado y muy ventoso. En mi opinión la
pesca estaría cercana al punto de frustración, pero me
equivoqué.
Cuando llegamos nos recibió Osvaldo quien nos
condujo a la Posada Punta Ramallo, cuyo titular es Vito
Chiavetta. A la recepción se sumaron el Guía Javier
Velázquez y Delfor Pavéz, dueño del Camping Don Delfor y
con ellos organizamos la salida para el día siguiente y
la cena, un exquisito asado en el Camping situado a
orillas del Río Paraná.
La orilla opuesta a la ciudad
presenta muchos árboles y ramas caídas producto de
socavaciones y ese palerío resulta ser un lugar
apropiado para poner una mosca bien pegada ya que, la
aceleración de aguas descontrola la natación de pequeños
peces que son atacados por los dorados. La precisión y
alcance le dio a Jorge dos tomadas fallidas de pequeños
dorados y una tercera en contienda en la que terminó
ganando el pez al desprenderse finalmente del engaño.
Por mi parte en ese rato tuve solo un pique que no
llegamos a fotografiar y luego, tras un marcado aumento
en la velocidad del viento, decidí pescar en baicast. Un
señuelo Alfers negro y naranja de media agua nos dio el
primer pique concretado en la mañana.
Los piques estaban
lejos de ser francos y los integrantes de la lancha
pensamos que el cambio brusco de temperatura estaba
influyendo bastante para ello.
Por un arroyo ingresamos
unos centenares de metros a las Islas Lechiguanas que
presentaron terraplenes con alturas parecidas entre si y
algunos de ellos tenían cortes que generaban el paso de
agua produciendo así muy buenas correderas en las que
suele acechar el dorado. Probamos en varias y si bien
vimos corridas de sábalos los dorados no tomaban ni
moscas ni señuelos.
Volvimos al Paraná, precisamente al
sector de palos. La ausencia total de sol hizo de las
suyas a lo que se sumó el viento y no tuvimos
respuestas.
Había pasado el mediodía y decidimos
corrernos hacia la costa de tierra firme en sectores
donde abundan fábricas que entre sus instalaciones
tienen grandes pilares que ingresan al fondo del rio y
donde el agua choca produciendo más aceleraciones.
Las
moscas de Jorge y su eficacia en los lances tuvieron
varias respuestas, entre las que aparecieron los dorados
menos chicos de la jornada. Los señuelos estuvieron con
menor efectividad pero sumaron.
Esa parte de la pesca,
pese a las dificultades, estaba cumplida y tratamos de
pescar alguno de los grandes paties que se obtienen todo
el año en la zona. Anguilas fue la carnada elegida y en
un garete de una hora el pique se mostró ausente
mientras el Paraná se tornaba más picado por el viento
sur y nos sacudía bastante. Debido a esto decidimos
abandonar al surgir una futura pesca diferente a
realizar, la que quedó más o menos delineada y tras ello
regresamos a la guardería de lanchas para dirigirnos a
la Posada y comenzar a preparar el regreso. Osvaldo y
Javier aparecieron minutos después tras un paso por una
panadería donde adquirieron productos excelentes que
sirvieron para un exquisito café en el complejo.
Ramallo,
además de su buena pesca, tiene entre otras cosas una
excelente atención en todas las esferas del Turismo, la
calidez de su gente, sus sitios históricos y varias
poblaciones que componen su Partido como son las de El
Paraíso, Villa Gral. Savio, Villa Ramallo y Pérez
Millán. Por ello en la Dirección de Turismo figuran los
lugares mencionados y sugieren también el paseo Viva el
Río, Cascadas Manantiales, Estancia Estrella Federal,
Plaza José María Bustos, Capilla Sagrado Corazón de
Jesús, etc.
SERVICIOS:
Guía de pesca: JAVIER VELAZQUEZ - Cel. +54
3407 15 411423 / 438943 Facebook: Pesca Ramallo Javier
Velázquez.
Alojamiento: Posada Punta Ramallo, Sr. Vito
Chiavetta Av. 24 de octubre s/n Cel. +54 9 11 63971510 –
www.puntaramallo.com.ar -
puntaramallo@gmail.com
Dirección de Turismo: A cargo del Sr. Osvaldo Villareal
– San Lorenzo y Mitre 54 03407 422412 Atiende de 8.00 a
16.00 hs.
www.turismoramallo.gov.ar -
turismoramallo@gmail.com
AGRADECIMIENTO ESPECIAL: Al Sr. Delfor Pavéz titular del
Camping DON DELFOR – Paseo ribereño – pavezelpescador@hotmail.com
+ 54 9 2477 688849
Complemento 1: El guía posee dos
embarcaciones equipadas con todo lo necesario, conoce el
río como pocos y se desempeña eficazmente.
Complemento
2: La Posada tiene dos piletas, una al aire libre y otra
bajo techo y calefaccionada, amplio parque y
estacionamiento, posee veinte habitaciones y capacidad
para más de cuarenta personas, aire frío - calor,
comedor, sala de estar, cocheras y un desayuno
continental de lo más completo y variado.
Complemento 3:
El visitante de Ramallo encontrará un lugar ideal para
la pesca, el relax y el descanso. Sobre la costa se
encuentran las playas con paradores ideales para
disfrutar de la arena y el contacto directo con la
naturaleza no solo en la temporada de verano sino todo
el año.
Este lugar del norte de la Provincia de Buenos
Aires conjuga historia y naturaleza, y ofrece una
importante infraestructura orientada al mini turismo y a
la práctica de deportes náuticos: veleros, lanchas, kayaks, piraguas, motos de agua, pesca, windsurf y sky.
La zona balnearia es una extensa playa sobre el rio, con
servicios, parrillas, restaurantes, bares y
estacionamiento.
Las ofertas de alojamiento incluyen campings y cabañas con todos los servicios
indispensables y hoteles con excelente ubicación, playa
de estacionamiento y restaurantes. Frente a la
localidad, en la margen izquierda del brazo sur del rio,
se extienden las islas Lechiguanas.
Toda la familia
puede disfrutar de los paisajes que el rio Paraná ofrece
junto a los arroyos.
Otra de las ofertas es el turismo
rural; se puede disfrutar de un día de campo sobre un
añoso bosque de eucaliptus, como así también visitar un
tambo donde se observará la fabricación de quesos
artesanales.
¡¡ Cordial saludo para todos y hasta una
próxima nota !!
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