Cuando comencé a pescar con mosca mis salidas eran exclusivamente en la zona central de Chile y de forma casi instantánea empecé a escuchar comentarios sobre una laguna cerca de Talca, sector cordillera, que tenia truchas gigantes y que era de muy difícil acceso.  Tenia en mi mente una laguna rodeada de totoras y sin grandes cerros alrededor y con muchos y grandes peces.  Varias veces intentamos coordinar un viaje a caballo pero fue imposible por temas ajenos a nosotros, no era en esa época fácil coordinar el viaje. Viajamos un par de veces a conversar con los arrieros pero fue complicado lograr la coordinación necesaria.

      Varios años más tarde de esto tuve la oportunidad de volar a este lugar y así poder pescar esos peces míticos de la cordillera central.  Decidimos partir a principios de mayo ya que pensábamos que los peces estarían cerca de las bocas esperando por las lluvias para remontar los ríos, seria una pesca segura nos decíamos.  Llegamos cerca de las 11.00 AM y de forma inmediata nos vestimos, y partimos a probar.   Varios esteros llegaban a la laguna y se sentía estar pescando en un lugar simple y prometedor. Después de un par de horas y sin ver un pez me fui a disfrutar del paisaje ( y recoger algo de basura que dejan los turistas de verano), ya que las pesca en este tipo de lagunas no me motiva lo suficiente, debido a la poca estructura que tiene y su profundidad.  Mi amigo armo un float tube y partió al rincón de la laguna, logro pescar una arcoíris de 2-3 kilos muy plateada y de buena forma.  Quedé desilusionado por la pesca pero encantado con el lugar, por lo que después de un par de años decidimos organizar otro viaje al Dial y probar en otra temporada, esta vez en noviembre, a ver si estaban las truchas desesperadas buscando alimento después de un largo invierno.

      Partimos tarde desde Pichilemu en dirección al Dial, llegando a la laguna cerca de las 11.45 AM.  Rápidamente 2 de nosotros armamos equipos y los otros se dedicarían a la parilla.

      Esta vez decidimos pescar caminando hacia el sur, ya que se veía una cama de algas en ese sector y además llegaba un hilo de agua parecida a un spring creek,

      Sorpresa nuestra fue que pudimos ver un par de buenas truchas emparejadas dando la impresión que todavía estaban en el proceso de desove.  Intentamos todas las técnicas pero estaban en otra cosa.  A los pocos minutos tuvimos la primera arcoíris de cerca de 1,5kg con un color azulado increíble, muy poco peleadora y con signos de desove reciente.  Después en el mismo sector salió otra arcoíris más larga. Se notaba el esfuerzo del desove en su cuerpo, la cola muy gastada y muy flaca.  Se nota lo tarde de este proceso en la laguna.

      Seguimos pescando sin suerte por lo que decidimos ir a comer y descansar un rato. Invitamos al arriero a disfrutar de la parilla y comenzaron las preguntas clásicas del pescador.  De qué porte salen, cuál es el mejor lugar, y muy ansiosos de escuchar las historias del lugar.  En eso estábamos cuando nos comenta que hace un par de días había pescado varias de 4 a 5 kilos.  Inmediatamente le dije tratando de dármelas de hábil, ¿dónde están las cabezas de esas truchas entre risas?.  Me responde "acá pooo"....! .  Caminamos 100 metros y estaban las cabeza de las arcoíris bastante grandes.  No podría decir que eran de 5 kilos pero de 3k seguro (pescadas con espinel de noche).   Después nos contó una historia sobre una arcoíris pescada en bote con trolling de 12 kg, bastó esta última historia para quedar con ganas de visitarla nuevamente con la esperanza de ver algo parecido.

      Más tarde logramos sacar otra trucha mas pequeña aún pero en mejor forma.  Claramente la pesca no era lo que esperábamos y nuevamente comenzamos a conversar y adivinar sobre cuál será la temporada correcta, quedando como opción diciembre o enero.

      Este mismo día que escribía esta nota, estábamos planeando otro viaje al Dial entre pascua y año nuevo, pero esta vez nos quedaremos a acampar y ahora si pescaremos esa trucha gigante del Dial..!!!!

      Lo importante es estar allá, disfrutar del lugar y si pescamos algo mejor, si no sale nada, será por la temporada o el calor, el agua muy baja y de seguro iremos en otra época hasta allá.

 

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