El río Calcurrupe es una de las aguas más importantes para la pesca deportiva con mosca de la región de Los Ríos en el sur de Chile. Este es uno de eso ríos en los cuales se ha forjado parte de la historia de la pesca con mosca en nuestro país y hoy en día se encuentra amenazado por la instalación de una piscicultura, la que sin duda traerá efectos desastrosos para las truchas asilvestradas del río y los salmones migratorios que llegan cada año a desovar en las aguas de esta cuenca.
La instalación de esta piscicultura ha sido rechazada en forma categórica por la comunidad de Futrono y Llifen. Pese a ello, el proceso de autorización del proyecto de esta empresa no se ha detenido, siendo que este río cuenta con medidas de protección especial, dictadas consecutivamente, desde el año 2000 por la Subsecretaría de Pesca.
Aquí dejamos una declaración de la Mesa Público-Privado de Pesca Recreativo de Futrono y la cual explicas las razones del rechazo a la amenaza que cae sobre el Calcurrupe, un río que no es otra cosa que un tesoro para la pesca deportiva y recreativa con mosca.
¡ RECHAZAMOS LAS AMENAZAS AL RIO CALCURRUPE !
La integridad y características del Río Calcurrupe, perteneciente a la cuenca del Lago Ranco, ubicado en las Comunas de Futrono y Lago Ranco, Provincia del Ranco, XIV Región de los Ríos, se encuentran amenazadas por la posible instalación de un proyecto de piscicultura industrial que utilizaría sus aguas. La Mesa Público-Privada de Pesca Recreativa de Futrono, atendidas estas circunstancias y asumiendo su deber, declara lo siguiente:
1. Durante los últimos años, una empresa privada ha solicitado con insistencia, autorización para instalar un proyecto de piscicultura industrial en el Río Calcurrupe. Esto ha sido sistemáticamente rechazado por la comunidad, incluyendo la Ilustre Municipalidad de Futrono, el Servicio Nacional de Turismo (SERNATUR), y otros organismos del sector público, en atención al daño que se causaría al ambiente, en especial los cursos de aguas de la cuenca, incluyendo también el efecto negativo sobre actividades tradicionales que se sustentan en las particulares condiciones del río y de todo su entorno, así como también las tradiciones indígenas, existentes desde tiempos ancestrales.
2. El Río Calcurrupe nace de las prístinas aguas del Lago Maihue, que a su vez se nutre de varios ríos cordilleranos. El área drenada y que conforma el Lago Maihue es de 1.602 Km.2 El Río Calcurrupe tiene un curso relativamente corto, con un trayecto de 16 kms. aproximadamente y entrega sus aguas al Lago Ranco, cuyo desagüe al mar es el Río Bueno. La cultura del pueblo mapuche williche, la gestión del territorio y el prestigio del Río Calcurrrupe en las actividades de la pesca recreativa se han complementado desde principios de la década de los 1940 y han sido reconocidas por decenios, tanto en Chile como en resto del mundo. Las condiciones naturales singulares de este curso de agua no tienen paralelo en ninguno de los ríos existentes en lo que se denomina “La zona de los grandes lagos Araucanos” (desde Villarrica por el norte hasta el Lago Llanquihue por el sur). Esto ha permitido desarrollar y sustentar actividades turísticas cuyo origen registrado, se remonta a más de 70 años. El respeto de los habitantes de la zona por el medio ambiente es una tradición de larga data y pretendemos que se extienda y profundice en el futuro, como un tesoro de la Región de los Ríos.
3. La pesca recreativa ha sido el pilar fundamental del desarrollo turístico e histórico de esta zona; cuya fama traspasó nuestras fronteras hace más de 70 años. La inversión en el sector turístico involucra un esfuerzo importantísimo, incluyendo: infraestructura, equipos de alto valor, inmuebles, edificios, pistas de aterrizaje para aviones “charter”, vehículos, embarcaciones, comunicaciones, etc. Además y más importante (aunque intangible para quienes no saben de turismo receptivo), es el capital y los resultados invertidos en una promoción consolidada, a través de más de medio siglo. Este sólo ítem supera con creces incluso a las inversiones inmobiliarias y su valor es, a estas alturas, incalculable e imposible de repetir. A esto se le debe agregar el compromiso y trabajo de una vida entera de varios profesionales, vecinos del sector, que hicieron posible un sueño convertido en realidad.
4. Como una clara demostración práctica y necesaria, surgió en el año 2000, la iniciativa de proteger los recursos pesqueros del Río Calcurrupe, mediante normas administrativas de manejo, para desincentivar la pesca indiscriminada y la exagerada extracción de recursos. Esta medida de manejo de los recursos, pese a las dificultades propias de fiscalización, ha demostrado resultados exitosos sorprendentes. Actualmente rige para estos efectos, la Resolución Exenta Nº01, de 16 de enero de 2012, de la Subsecretaría de Pesca, del Ministerio de Economía, que se ha venido renovando ininterrumpidamente desde el año 2000.
5. La proyección turística del área, también tiene como efecto práctico, medidas como la declaración de Zona de Interés Turístico (ZOIT) de SERNATUR, dentro de la cual se encuentra el Río Calcurrupe, calificación que constituye una demostración categórica de la excelente calidad de los recursos y debe servir de orientación a las actividades de desarrollo económico sustentable. SERNATUR ha invertido importantes recursos humanos, económicos y técnicos en capacitar, a través de programas especiales, a muchos jóvenes de la zona para actuar en las diversas áreas del turismo receptivo de aventura. También el Estado, a través de SERNATUR, ha hecho una importante promoción a través de ferias, programas de TV, películas, folletería, Internet, festivales y reuniones ad-hoc tanto en Chile como en el extranjero.
6. Sin embargo, es sorprendente que contra todos estos criterios de desarrollo sustentable de la zona y a pesar del rechazo regional, durante el segundo semestre del año 2013 se conoció de una discrecional aprobación para un proyecto de piscicultura en la ribera norte del Río Calcurrupe, basado en una simple Declaración de Impacto Ambiental (DIA). La comunidad debe saber que en la evaluación ambiental del proyecto, la unanimidad de los representantes de los distintos organismos técnicos y políticos regionales rechazó el proyecto (comisión de 9 miembros), porque implica un posible atentado al río y un perjuicio evidente a los usos y costumbres de la comunidad local, de manera que mínimamente era exigible un Estudio de Impacto Ambiental (EIA). A pesar de lo anterior, un solo funcionario en Santiago, el entonces Director Ejecutivo del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), de forma unilateral e inexplicable, dilatando injustificada e indebidamente la gestión administrativa, fue capaz de deshacer aquella criteriosa decisión de esos nueve funcionarios regionales, bajo excusas puramente formales que terminarían por aceptar el proyecto, con un déficit importante de evaluación de todos sus efectos nocivos sobre el Río Calcurrupe y en general, para la cuenca del Lago Ranco y sus habitantes. No debe dejar de mencionarse, en todo caso, que, paradójicamente, la Dirección Regional de Los Ríos del SEA fue y sigue siendo un verdadero promotor de la instalación de la piscicultura y de otros proyectos que tienen una alta probabilidad de hipotecar el desarrollo sustentable de nuestra comuna.
7. Las pisciculturas industriales (independientemente que sean de circuito abierto o no), como la del proyecto, son dañinas al ambiente acuático y a las especies que viven allí. Además constituyen un riesgo permanente desde que se inician en actividades. Alteran especialmente aquellos ambientes que todavía mantienen valiosas particularidades naturales, como es el caso del Río Calcurrupe. Bastará un pequeño accidente o un imprevisto, para producir un enorme efecto negativo sobre el curso de agua y sus recursos hidrobiológicos, que será de todos modos irreversible.
8. La sola presencia de una piscicultura, en un área silvestre, como la del Río Calcurrrupe es un daño irreparable en sí mismo, y ello tendrá efecto negativo inmediato para el desarrollo turístico de la zona. Ningún turista pescador serio, que busca y exige lugares de primer nivel, se interesa por visitar lugares donde existen pisciculturas. Si a esto se añaden los contaminantes orgánicos y químicos de una piscicultura, la muerte del Río Calcurrrupe como un destino privilegiado para la pesca de excelencia, es un hecho asegurado. El riesgo de introducción de virus, bacterias, parásitos u hongos, es insoslayable en una piscicultura. En el caso de los virus que se puedan propagar a las especies silvestres, es sólo cuestión de tiempo: si hay una piscicultura, tarde o temprano va a ocurrir; la experiencia y bases científicas así lo demuestran: La tragedia gigantesca sufrida por el sector de acuicultura de salmones, ocurrido recientemente en Chile, con un costo astronómico en términos económicos y los más de 52.000 cesantes que produjo, deben servir de un ejemplo concreto, para no cometer nuevamente el mismo error. En términos simples: La pesca turística de excelencia es incompatible con la sola existencia de pisciculturas de cualquier naturaleza en el curso de agua o sus tributarios, donde se realizan estos programas. Esto es también válido para otros tipos de intervenciones importantes en los cursos de aguas, con otras industrias u obras civiles, extracción de áridos, etc. No existe un argumento razonable para aceptar cambiar un recurso turístico de primera calidad, por otro de tercera clase cuya mediocridad es indiscutible.
9. En cuanto a los posibles beneficios (limitados y discutibles) que aportaría la aventura de un proyecto de una piscicultura, en el utópico supuesto que esa operación tuviese el éxito esperado por sus dueños, no tienen relevancia ni comparación posible. Los recursos (ilimitados e indiscutidos) del resto de las actividades que sustentan a la comunidad local, son evidentes y comprobables a simple vista. El desarrollo económico sustentable de la zona se vería seriamente afectado si se aprobara el proyecto de la piscicultura y éste se materializara. El beneficio, por lo demás eventual, de los particulares titulares del proyecto, no tiene relación ni justifica el riesgo y el daño a la comunidad local y a la Región. (También al país)*.
10. Estamos en conocimiento que actualmente existen esfuerzos de varios vecinos intentando remediar esta situación para anular la aprobación del proyecto de piscicultura. Además, se están estudiando otras acciones que el ordenamiento jurídico permite en el mismo sentido. Esta Mesa Público-Privada de Pesca Recreativa de Futrono adhiere a las acciones emprendidas y, en la medida de sus atribuciones, se sumará a todas las demás acciones que se emprendan con el objetivo de proteger el Río Calcurrupe, en la confianza que finalmente las autoridades administrativas y jurisdiccionales comprenderán los efectos dañinos del proyecto de piscicultura y primará el criterio y la prudencia.
Finalmente, y en el plano de los esfuerzos que el país hace para promocionarse como un destino turístico preferente, esta Mesa Público-Privada de Pesca Recreativa de Futrono, no se puede sustraer a lo que llama mucho la atención, en cuanto a que en la flamante “Región de Los Ríos”, nos encontremos en un debate, tratando precisamente de impedir la destrucción de su río más famoso. Llamamos a la comunidad, regional, nacional e internacional, a sumar esfuerzos para preservar el medio ambiente de la “Región de los Ríos” en general y su tesoro turístico, el Río Calcurrupe en particular.
MESA PÚBLICO-PRIVADA DE PESCA RECREATIVA DE FUTRONO |
- Ilustre Municipalidad de Futrono |
- Adrián Dufflocq Borie |
- Carlos Carmona Fernández |
- Fernando Maturana Crino |
- Margot Cárdenas Sandoval |
- Miguel Proboste Ziegler |
Imágenes del río Calcurrupe, región de Los Ríos, sur de Chile:
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